miércoles, 22 de agosto de 2012

USTEDES, NOSOTROS....QUIENES?


Días atrás, comenté acá un episodio digno de sainete que pasamos con la Vasca a raíz del asalto que lamentablemente ella sufrió. En ese comentario, traté de reflexionar sobre los manejos a los que somos sometidos desde el Poder. No desde el Gobierno de Cristina, de Mauri o de Fulanito de Tal. Sino desde el Poder estatal, que es otra cosa. Traté de pensar en voz alta sobre cómo somos tratados, como somos concebidos a modo de sujetos de manipulaciones mediáticas, en donde la vida misma intenta ser mediatizada, percibida y hasta vivida a través del tamiz de los medios de información. Para mi criterio esto último es peligrosísimo. Y es lo que quise decir en mi reflexión, y dejarles para que piensen por Ustedes mismos. Además de tener y compartir una mirada crítica al tratamiento que tiene el Estado argentino (y digo Estado, y NO Gobierno) respecto de los ciudadanos de este país.

En medio de todo, se coló la opinión de una persona, que prácticamente celebró que cosas así me pasaran a mi mujer y a mí. Supongo que por nuestra condición (de alguna forma hay que definirla, y estoy seguro que no es la más acertada) de peronistas, y mi situación laboral de funcionario público. O al menos así se interpreta en la lectura de su comentario.

Esto me lleva a la siguiente reflexión:

Argentina es un país que vive azotado por los enfrentamientos. Los tiene de todo tipo. Que existan diferencias es normal en las sociedades de todo el Mundo, y de todos los Tiempos. Lo que vuelve patológico el asunto es que las mismas contaminen todo.

Que un tipo, porque es radical, se ponga contento porque a otro, que es peronista, lo afanen y el Estado lo trate como a un siervo de la gleba, me parece alarmante. Vuelvo a insistir: que te afanen es algo que te puede suceder acá y en cualquier lugar del Mundo. Sea el Primero, Segundo, o el Tercero. Es propio de la vida en sociedad que alguien te robe. Lo llamativo es que el Estado te maltrate cuando en realidad fuiste víctima de un hecho semejante, y lo trágico es que alguien que viven el mismo país que vos y que tiene las mismas posibilidades de que le pase lo mismo que te pasó a vos, festeje por la sencilla razón de que, políticamente, ambos piensan distinto.

Si hubiera una forma de medir el grado de insensatez, estupidez y mediocridad que tenemos como sociedad que baila desenfrenada mientras el Titanic en el que baja se hunde, creo que esto último encaja a la perfección como termómetro de imbecilidad.

Repito, no se trata de UNA PERSONA estúpida, de hecho no pienso eso de quien comentó lo que comentó. No lo juzgo, ni lo agredo. de verdad. Lo que si creo es que estamos enfermos, o algo malo nos pasa. Estamos en el horno , poque ese es un lamentable pensamiento y una triste mirada nuestra, tuya y mía, que nos hace comportarnos como sociedad estúpida.

Cierro con unas palabras maravillosas escritas por Shakespeare en 1611...si, hace más de cuatrocientos años. Son de la obra "La Tempestad", y pertenecen al personaje de Shylock

"Soy un judío. ¿Es que un judío no tiene ojos? ¿Es que un judío no tiene manos,órganos, proporciones, sentidos, afectos, pasiones? ¿Es que no está nutrido delos mismos alimentos, herido por las mismas armas, sujeto a las mismasenfermedades, curado por los mismos medios, calentado y enfriado por el mismo verano y por el mismo invierno que un cristiano? Si nos pincháis, ¿no sangramos? Si nos cosquilleáis, ¿no nos reímos? Si nos envenenáis, ¿no nos morimos? Y si nos ultrajáis, ¿no nos vengaremos? (...)"

Tanto ultraje, tanto maltrato y tanta falta de solidaridad entre nosotros, va a hacer que terminemos matándonos. TODOS NOSOTROS, ENTRE NOSOTROS MISMOS.

A quienes nos acercaron por este medio palabras de cariño, solidaridad y apoyo...GRACIAS!!!! De parte de la Vasca y mía. Nos sentimos mejor al saber que nos acompañaron aunque sea con una palabra y un gesto de afecto.

Se cuidan

No hay comentarios:

Publicar un comentario